Humor no falta en M-Sport: si tienes un piloto que se llama Ott Tanak y «hunde» uno de tus coches como si fuera el Titanic… La broma está servida. TiTanak dio la vuelta al mundo en horas gracias a las redes sociales (¡qué invento, oiga!) y el equipo lo ha aprovechado para mandar un comunicado que titulan, precisamente, como ves sobre estas líneas.
Son positivos, no hacen leña del árbol caído y no incluyen el famoso vídeo en el que se ve al estonio cayendo al agua y nadando para salir de un vehículo que va a pique (aunque sí hay un par de fotos del momento clave). Yo tampoco pondré esas imágenes: estoy segura de que las has visto mil veces a estas alturas y nuestra política no es ensañarnos con los accidentes en los rallyes (para eso ya están los medios tremendistas). A cambio, aquí tienes, minuto a minuto, cómo fue la reconstrucción del Ford Fiesta RS WRC de Tanak, que los mecánicos lograron reanimar para que el piloto volviera a la prueba, reenganchado en Rallye2.1. Terminó en la 22ª plaza y se llevó un punto para el campeonato de Constructores, algo digno de mención. Esta es la historia de una de las mayores reparaciones que se han llevado a cabo en este deporte.
Viernes, 6 de marzo: el móvil que siguió funcionando
09:26, hora local. El Fiesta con el dorsal número 6 se sale de la pista 2,3 km después del inicio del tercer tramo y se hunde en un embalse con cinco metros de profundidad.
09:30. El siguiente coche en la especial llega a la meta y se hace evidente que ha ocurrido algo grave. El equipo contacta con la organización para saber qué ha pasado.
09:38. El tramo es interrumpido; entra el vehículo de intervención rápida. Poco después, confirma que Tanak y su copiloto, Raigo Molder, están bien.
10:17. Ambos son llevados al parque de trabajo en helicóptero. Regresan al hotel y pasan un completo chequeo médico. Molder empieza la concienzuda tarea de secar sus notas hoja por hoja.
12:09. Piloto y copiloto vuelven a la asistencia para realizar algunas entrevistas. El equipo envía a los mecánicos para que supervisen el «rescate» del Fiesta.
16:30. Se permite la entrada de los vehículos de recuperación a la especial.
16:45. Los organizadores envían a los primeros buceadores para que localicen el coche: no está sobre sus cuatro ruedas.
17:45. El Ford Fiesta RS WRC emerge del agua y se coloca en un terraplén.
18:00. El vehículo pasa a la grúa. Se recupera el teléfono móvil de Molder… ¡que todavía funciona!
20:15. El coche llega a la asistencia y los mecánicos comienzan a evaluar los daños.
21:30. Empiezan las reparaciones; sólo hay tres horas para devolver el Ford a la vida. De lo contrario, no podrá acogerse al Rallye2 y tendrá que abandonar.
21:55. El Fiesta ha sido desmontado casi por completo. No tiene parabrisas, alerones, parachoques, puertas, suspensiones, caja de cambios, turbo ni equipo de refrigeración.
22:00. El ritmo frenético se detiene, ya que, por reglamento, sólo un mecánico puede examinar el sistema de combustible. Tras la revisión, el responsable decide sustituir el depósito.
22:03. Todos los técnicos vuelven al trabajo y quitan el depósito. También sacan los asientos, salpicadero, la radio y el equipo electrónico.
22:15. Hay que achicar agua, ya que todavía queda bastante en el habitáculo.
22:25. Una de las fijaciones del motor se ha dañado, pero un experto vuelve a sujetarlo con firmeza. El exceso de agua en el bloque empieza a secarse.
22:30. Con dos horas para finalizar todo el trabajo, empiezan a montar de nuevo el coche, pieza por pieza. Cada una de las que han sido retiradas es sustituida por otra nueva, excepto los bacquets, cinturones, el capó y el kit de herramientas.
23:00. Los técnicos intentan poner en marcha el propulsor.
00:05. El tiempo para reengancharse al Rallye2 se está agotando. El motor vuelve a la vida.
00:10. En los últimos 20 minutos, los mecánicos colocan el capó, comprueban que el cambio funciona e incluso tienen tiempo para lavar el vehículo. Tanak y Molder llevan el Fiesta al parque cerrado.
Sábado, 7 de marzo: los aplausos de tus rivales
08:30. Piloto y copiloto regresan al coche para afrontar la etapa… Pero descubren que no arranca; es el resultado de haber estado parado toda la noche.
08:31. M-Sport piensa con rapidez; tan pronto como Tanak y Molder empujan el Fiesta fuera del parque cerrado, un mecánico con un vehículo de reconocimiento lo remolca a la asistencia.
08:32. El Ford se coloca de nuevo bajo las carpas. De fondo suenan los aplausos respetuosos de los otros equipos; los rivales reconocen el duro trabajo. Es uno de los momentos más emocionantes del fin de semana.
08:33. Los especialistas ajustan la geometría del coche, cambian las bujías y el encendido eléctrico (dos veces). Revive.
08:49. Tanak lleva el vehículo a la zona de refuelling. Por desgracia, vuelve a pararse poco después de salir de allí.
09:25. El piloto estonio y su copiloto toman asiento en el Fiesta, completamente reparado al fin. Pero se ha sobrepasado el tiempo límite para llegar a la primera especial, por lo que no pueden tomar la salida.
10:28. El Ford regresa al parque de trabajo, donde se deja secándose bajo el sol mexicano. Todo está listo para el Rallye2.1.
15:10. Comienza el período de tres horas para acogerse al Rallye2.1. Se sustituyen todos los sensores que miden la presión del aceite y el cableado eléctrico del motor. Se realiza un cambio de aceite y se reajusta la geometría.
16:25. Se «reinicia» el propulsor y el ingeniero responsable comprueba los datos. Decide remplazar la centralita por precaución.
17:12. Tras un par de ejercicios de arranque y parada (con el fin de garantizar que todo funciona correctamente), el Ford Fiesta RS WRC con el dorsal 6 regresa al parque cerrado, listo para la batalla durante la última etapa de competición. Esto sí es un final feliz.