A ver, a todos nos gusta jugar a los jefes de equipo y elegir a los pilotos que, en nuestra opinión, son los mejores, pero debemos tener en cuenta que cuando una formación confía en alguien, no lo hace a ciegas (aunque quizá no hubiera sido una de nuestras opciones). Dejando aparte temas de presupuestos y sueldos, han visto en él un potencial, saben hasta dónde pueden exigirle y son conscientes de que hay resultados que, sencillamente, son fruto de la mala suerte -y en este deporte se da mucho-. Por eso las oportunidades se repiten: Bryan Bouffier va a estar ante “su público” en el Rallye de Alsacia y Kris Meeke podría continuar en Citroën la próxima temporada.
Ayer ya os contábamos que Hyundai ha hecho pública su alineación de pilotos para las próximas pruebas de asfalto (pincha aquí para ver la noticia) y que Bouffier está entre ellos. Su actuación en Alemania -se salió en dos ocasiones y tuvo que abandonar- quizá hacía sospechar que Michael Nandan no volvería a ponerlo al volante de uno de los i20 WRC, pero el francés estuvo en el desarrollo del coche, ganó en Antibes y ésa fue la primera victoria del equipo… Esas cosas no se olvidan.
Con Meeke la situación es distinta. Él sí forma parte del equipo Citroën en todas las citas; le “han perdonado” sus actuaciones en el inicio de la temporada sabiendo que ahora llegaban los rallyes que conocía mejor. Aquí era donde iban a exigirle más… Pero en Alemania una nota incorrecta le hizo salirse de la carretera. Aun así, Yves Matton, jefe de la formación gala, asegura que el incidente no complica sus opciones para permanecer en el equipo: “El trabajo que ha hecho desde principios de 2014 ha seguido la progresión que esperábamos. Hacía tres años que no competía con un WRC sobre asfalto; llegó a Alemania en condiciones muy complicadas y estuvo realizando una buena actuación. Eso es lo que voy a tener en mente cuando tome una decisión”, añade.
También Meeke está tranquilo en este aspecto: se queda con lo bueno y mira hacia adelante para tratar de no cometer los mismos errores y así mantenerse en el equipo. Tiene más oportunidades que Bouffier para demostrar su valía. Y ambos son conscientes de lo que se juegan, así que… Get your game on, go, play.