Pueden hacerse con el título de Constructores este fin de semana en el Rallye de Australia, uno de sus pilotos será el vencedor del WRC 2014, tienen el mejor coche y la «plantilla» más efectiva… pero no todo es paz y armonía en VW. Al parecer, este verano han aparecido tensiones entre Jost Capito, director del equipo, y Sebastien Ogier, su estrella. Así lo afirma autosport.com, medio al que el propio Capito ha negado un distanciamiento con el galo.
Ogier está en plena renegociación de su contrato con el equipo germano y podría buscar un aumento de sueldo acorde a su condición de campeón mundial de la especialidad. Las relaciones con Capito se han ido deteriorando en estas conversaciones… Pero no es sólo una cuestión de dinero: también hay diferencias de opinión sobre las normas que regirán el WRC en 2015 (el director deportivo de Volkswagen está a favor de un tramo final en el que los pilotos se jueguen las posiciones, mientras que los interesados -es decir, los participantes- no están precisamente encantados con la idea). Por suerte, Capito ha anunciado a la web inglesa que las aguas han vuelto a su cauce: «Creo que no tenemos ninguna razón para cambiar nada, y ninguna razón para que alguno de nuestros tres pilotos cambie algo. Estamos contentos con ellos y ellos también con nosotros», añade.
Asimismo, el responsable de la formación germana ha comentado que se reunió con Ogier durante el Rallye de Alemania para hablar sobre la próxima temporada: «Cuando terminó la etapa del viernes, estuvimos charlando los dos solos durante media hora; creo que eso demuestra lo fuerte que es nuestra relación». Curiosas palabras, pero a estas alturas de la película ya sabes que Capito no da puntada sin hilo. Los rumores dicen que los problemas del galo en Alemania -donde chocó dos veces- empezaron, precisamente, con las especulaciones sobre la tensión entre él y su jefe. «Ogier necesita saber que creo en él y lo hago ciegamente. Estoy convencido de que regresará en Australia más fuerte que nunca», asegura.
¿Qué tiene que decir a esto el piloto francés? Ha admitido que estos meses han sido un poco problemáticos, pero que ya está totalmente concentrado en su trabajo y con la mente puesta en Australia. «Es genial tener mucho éxito, pero desgraciadamente también habrá siempre momentos difíciles. Este verano no he sido tan fuerte (ganó en Polonia, pero Jari-Matti Latvala, su compañero de equipo, venció en Finlandia. Después, los incidentes en Alemania), me he distraído y eso, definitivamente, me ha hecho más débil. Pero he trabajado sobre ello y lo he dejado atrás: estoy concentrado en el aquí y el ahora y se puede contar con mi regreso al 100%», explica.
De momento, ha sido quinto en el shakedown del Rallye de Australia -empatado con Mikko Hirvonen y su Ford Fiesta-, tras Kris Meeke, que ha marcado el mejor tiempo, Mads Ostberg, Thierry Neuville y Latvala. Mañana, en los tramos, comprobaremos si sus palabras quedan refrendadas por hechos. En el caso de Ogier, suele pasar…