Una charla en la estación de servicio y el reto de bajar de los 9 minutos

| 27/05/2016

Antes de nada, sí, no va de rallyes, pero el protagonista sí ha sido y es piloto habitual en esta especialidad. Romain Dumas, ya lo hemos hablado en alguna ocasión, forma parte de esa estirpe de volantistas galos que le pegan a todo lo que tenga motor, volante y ruedas, y encima tienen cierta facilidad para destacar en todas ellas. Habitual en las pruebas de resistencia en circuitos, Romain también fue uno de los pocos participantes en la extinta copa FIA GT de rallyes a los mandos de un Porsche 997 GT3. No solo eso, también se hizo eco de su participación en el Dakar. En 2015 lo hizo con un buggy; esta pasada edición directamente adquiriendo uno de los primeros Peugeot 2008 DKR que liberó la marca oficial.

Rallyes, Le Mans, Dakar… por supuesto nos faltaba el Pikes Peak. Como bien sabréis Romain fue el ganador de la edición de 2014 de esta prueba mítica (lo consiguió al tercer intento) y además con un tiempo de 9:05.801 que le permite entrar en la élite de los tres mejores cronos de la historia. Bien es cierto que éstos han llegado desde que el Pikes Peak se disputa sobre asfalto, perdiendo el encanto original cuando Vatanen se cubría del sol con la mano entre derrapada y derrapada con el Peugeot 405 T16.

El caso es que de momento queda lejos la meadita que dejaron Peugeot y Loeb en 2013 (8:13.878) pero no el intentar bajar de los 9 minutos. Y ésta será la meta de Romain para la edición de 2016, que se disputa el próximo 26 de junio. Tiene además mucho de especial, pues el Pikes Peak celebra su centenario. Como para no participar. «Esta prueba es algo aparte para mí. Quienes me conocen lo saben. Así que no podía perderme su edición número 100!» ha reconocido el galo en su comunicado de prensa en el que poco más te dicen, pero te ponen los dientes largos de las muchas aventuras en las que se mete.

Fiel desde su primera participación, Romain Dumas de nuevo volverá al Pikes Peak con una barqueta Norma convenientemente pasada por las manos de su equipo RD Limited para adaptarla a la prueba americana, en la que competirá encuadrado dentro de la categoría Unlimited -parece un juego de palabras, pero es así-.

Aquel vehículo, el de 2014 (versión M20 del fabricante francés) ya tenía muchas modificaciones con respecto al modelo del que partía, especialmente en cuanto dimensiones (se recortó la distancia entre ejes) peso o aerodinámica. Equipaba un motor Honda turbo de 4 cilindros del que oficialmente declaraban 450 CV para 610 kg de peso; una relación discreta para los monstruos que suelen habitar esta rampa de Colorado. Pero de la de este año de momento ni mu. Prometen nuevas ideas que irán contando en próximas semanas.

Del Pikes Peak poco más que decir que no conozcáis de haber leído mil y una veces lo de los 20 km de recorrido, las 156 curvas o los 4.300 metros de altura en los que la falta de oxígeno afecta a pilotos y mecánicas… todo sigue más o menos igual 100 años después. Con asfalto pero igual.

¿Y lo de la conversación de gasolinera? Pues simplemente que este proyecto de Romain Dumas con varios años de presencia en el Pikes Peak surgió de una conversación entre él y Norbert Santos, propietario de Norma Auto Concept, en un lugar tan idílico como ese. Ya veis, las grandes ideas surgen en los sitios más insospechados.

Hala!, un paseo con él…

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