Todo empezó en el rally de Curtis. Decidiste correr y te hiciste con victoria. A principios de año, ¿te esperabas que esto pasara?
No me esperaba esto y ahora mira. Yo al rally de Curtis iba con mucha ilusión pero lo que quería era comprobar cuánto de cerca estaba de los mejores. En el primer tramo me crecí porque mis tiempos estaban cerca de los arriba. Vi que tenía ritmo con los demás. En ningún momento pensé en seguir, pero las cosas vinieron así. Con la victoria, mi patrocinador Javier Ramos, estaba casi más emocionado que yo. Fue él el que me obligó a seguir el campeonato, y yo en un principio me negué. Se lo debo en gran parte a Disiclin.
En ARVidal habéis estado trabanjado duro con el Polo. ¿Cómo ha sido el desarrollo de este coche? ¿Ha cambiado mucho desde principios de año a ahora?
El coche inicialmente era de Eugenio Mantecón, como ya sabe todo el mundo, lo compró en Polonia y antes de ser nuestro al 100%, ARVidal ya estuvo trabajando en él. Fue campeón de Cantabria, pero en el Nacional de Asfalto, el Polo no era lo suficientemente competitivo. Desde que fue completamente nuestro se le añadieron las mejoras que yo consideré pertinentes para llegar a donde llegamos ahora.
El apoyo de los patrocinadores es fundamental. Y en tu caso, el de Disiclin.
A mi Disiclin me apoyaba antes de correr en el Polo. Javier tenía un Subaru que pusimos a funcionar. Empezó como cliente y ahora es un gran amigo. Tengo más patrocinadores que son importantísimos, pero sin la ayuda de Disiclin sería imposible.
Después de ser campeón de España de rallyes de tierra este año, te animarás a ir a por el segundo titulo el año que viene?
Ahora es muy temprano para hablar de est0. Javier esta maquinando algo, no sé lo que es, pero es muy temprano para decidir. Yo vivo de que los demás corran, no de correr yo. Llevo el equipo de Suzuki, que me lleva mucho tiempo, y aparte tengo más clientes, que son mi prioridad. El año que viene ya veremos…