Sebastien Loeb y Citroën se separan, ya lo sabes. No hay un programa para él en el WTCC, aunque va a Peugeot para su participación en el Dakar, así que en realidad no estará lejos… Pero las compañías de PSA, unidas en lo comercial, prefieren «distinguirse» en lo deportivo. Y Loeb, un caballero, no ha hecho algo tan fuera de lugar como despedirse a la francesa (perdón por el chiste fácil). Al contrario, todo son buenos deseos para la marca que ha sido «su casa» desde que el mundo es mundo… O casi.
Sus palabras son muy emotivas; no podía ser de otra forma después de una trayectoria como la suya. Asociado a los chevrones desde 1998, se convirtió en el mejor piloto en la historia del WRC, si atendemos a los números: así lo refrendan nueve títulos mundiales y 78 victorias antes de retirarse de la disciplina en 2012. Después de esa fecha, sus apariciones en la máxima categoría han sido esporádicas; la última de ellas, en Montecarlo, el pasado mes de enero, recoge wrc.com.
«Una hermosa historia termina, pero no me arrepiento. Al contrario; sólo guardo buenos recuerdos. Desde el inicio de la década del 2000, Citroën ha estado muy cerca de mi corazón. He vivido momentos increíbles que no podía haber imaginado cuando era joven, por eso me gustaría dar las gracias a todos los que me han facilitado la oportunidad de dedicarme a mi pasión todos los días, a los que tuvieron confianza en mí y me acompañaron en estos triunfos», comienza el francés, de 41 años.
«Escribimos bellas páginas en la historia de la marca en competición. Por supuesto, todos esos momentos los compartí con los hombres y mujeres de Citroën Racing, los mecánicos, ingenieros y también con ‘Danos’ Elena (Daniel Elena, su copiloto). Estos compañeros se convirtieron en mis amigos, en una segunda familia. Sólo puedo decir: gracias», ha añadido Loeb.
¿Qué ha respondido la firma automovilística? Linda Jackson, consejera delegada de la empresa, rinde su homenaje: «En los últimos 15 años, Sebastien Loeb y Citroën han hecho historia juntos. Ha sido un período absolutamente increíble y dejará una huella duradera en el mundo del motor. Nos gustaría darle las gracias por todos estos triunfos, títulos y récords», ha comentado. Yo habría añadido que también ha creado una leyenda. Ahora, se lleva su magia al Dakar, el sitio donde surgen héroes. No encuentro un escenario más adecuado, la verdad.