Marketing al poder. En su momento, hace ahora siete años, Chelís Gómez estaba en boca de todos. No sólo por sus dos títulos de Campeón Gallego de Gr.N a los mandos de un Mitsubishi Evo IX… también por una imagen de equipo que no pasó desapercibida. Su principal patrocinador dio que hablar en la prensa, y pie a más de una anécdota…
Personalmente todavía recuerdo la presentación oficial del equipo en su segunda temporada al máximo nivel. Un acto celebrado en las instalaciones de su patrocinador donde además de degustar exquisitos pinchos de tortilla de patata, en un momento dado el gerente de aquel negocio ordenó salir a un grupo de explosivas profesionales que dieron lustre a la foto con el vehículo… y más de un sopor a algún que otro fotógrafo que por allí andaba.
Y el marketing funcionó, porque el propio gerente de aquel negocio reconocía que el fin de semana siguiente a cada rallye del Campeonato Gallego, la cosa repuntaba -y no va con doble sentido-
Bromas aparte, Chelís Gómez, que es el verdadero protagonista de este artículo, se topó con un gran muro hace siete años. Aquel patrocinador desapareció y entre lo difícil de buscar apoyos y lo caro de mantener un programa a ese nivel, su carrera deportiva se detuvo por completo…
…hasta ahora, siete años después, con el 47º Rallye de Ourense. Chelís vuelve; con más canas, desde abajo y sin ningún tipo de remordimiento por lo vivido y disfrutado. Pilota un Fiat Grande Punto Abarth prácticamente de serie, «porque el presupuesto es el que es, llevo muchos años sin correr y porque aspirar a algo más a día de hoy es muy complicado». Como bien reconoce, toca hacer kilómetros y progresar poco a poco: «el coche es muy de serie, corre poco y la caja de cambios hay que tratarla con cuidado. Pero mi planteamiento para esta carrera es el de acabar y recuperar sensaciones perdidas».
Será un primer test, pues por sus declaraciones parece que el veneno de las carreras ha vuelto a picar… o siempre estaba y ahora se ha reactivado, aunque en su momento el alejamiento del motor fue total. Porque, aunque inicialmente pretendía correr más rallyes con este vehículo, ahora parece ser que entre sus planes podría estar la Copa Suzuki Swift.
«Visto lo visto, sería la opción más lógica para alguien como yo… y con el presupuesto que tengo», sostiene quien incluso se plantea correr con uno de estos vehículos en el próximo Rallye de Ferrol…