Para Tom Fowler, el jefe de ingenieros del equipo Toyota, el concepto general del nuevo Yaris WRC es diferente al del resto de sus rivales, algo que considera que les puede dar una ventaja. El coche que está rodando actualmente es una carrocería de 2015 con la mecánica de 2017, el modelo definitivo parece que será distinto del actual. Máxime teniendo en cuenta que Toyota está dando mucha más importancia a la aerodinámica que lo que tradicionalmente vimos en coches de rallyes.
Para Fowler, el hecho de partir de una hora en blanco y no heredar nada ni por razones prácticas o de presupuesto, supone una ventaja.