Serpenteas por una carretera estrecha y entre idílicos prados en el inicio del tramo de Llanera. Todo muy bonito, todo muy bucólico, pero en una izquierda lenta, bien escondida por la abundante vegetación local, una piedra puñetera echa al traste con tu carrera.
A Gorka Antxustegi, que entraba en el giro reduciendo a segunda con su Swift S1600, no le dió tiempo ni a soltar un improperio; una centésima de segundo después del fuerte impacto el Suzuki daba un par de volteretas y terminaba en la hierba… algo parecido -sin vuelco pero también sin rueda- a lo que vivía una pasada después el piloto Rashid Al-ketbi. Tras impactar con la roca maldita el catarí arrancaba una rueda de su Fiesta R5 y salía recto como un misíl en dirección a un prado en caída del que no podía salir sin la ayuda de una grúa.
La primera etapa del Rallye Princesa de Asturias ha sido prolija en abandonos… también muchos de ellos por salida de carretera. Pero en lo que no ha cambiado es en la pelea de cabeza. Vuelven a cumplirse los pronósticos y, de momento, volvemos a tener duelo Fuster-Ares, con ventaja para el primero, y un tercer puesto de Sergio Vallejo al que se le sigue viendo un peldaño por detrás de sus rivales en cuanto a ritmo de carrera.
Jonathan Pérez se mantiene a espaldas de los GT, que en seco han corrido de lo lindo… quien sabe si temerosos de lo que pudiera pasar mañana con las previsiones meteorológicas que se anuncian y la situación en la que se ponen los tramos.
Y en dos ruedas motrices a Fran Cima le ha venido de perlas la competencia nacional y extranjera, liderando la Clio R3T y siendo incluso más rápido que el mejor R2… y ese no es otro que Manuel Mora. Se confirmaron las sospechas de Ferrol. Si en Galicia el asturiano con el 208 cuajó un gran rallye, qué no iba a hacer por los tramos de su tierra. Pues de momento atizar duro a los líderes de la categoría, Víctor Senra y Esteban Vallín, que completan podio en esta primera etapa, aunque a un buen puñado de segundos del destacado líder.
Por cierto, excelente primera joranda de Angel Paniceres, que llegó a rodar más rápido que el jefe de filas; nefasto día para Pablo Pazó, que abandonaba por salida de carretera.
Mañana todo puede cambiar. Día nuevo, tramos complicados y nuevas previsiones meteorológicas. Los legend pondrán la nota de color a una carrera en la que todo está por decidir.