En recientes declaraciones, el ganador de la pasada edición del Rallye Dakar, Nasser Al-Attiyah, apuntaba a los Toyota oficiales como uno de los equipos a tener muy en cuenta en la carrera sudamericana de 2016, dado el tipo de especiales que se plantean para esta ocasión. Por el contrario, aseguraba que los Peugeot todavía no estaban listos para llevarse la victoria en esta prueba. Sin llegar a ser tan taxativos como el catarí, lo cierto es que Toyota está muy cerca de aspirar a algo que de momento se lo ha negado la historia… salvo en las categorías de producción, donde es una de las marcas referencia. Han estado cerca los últimos años, y en este 2016 vuelven a la carga jugando con bazas a la contra con las que podrían dar más de una sorpresa.
De entrada siguen apostando por un equipo de tres vehículos, con el experimentado Giniel de Villiers como cabeza de cartel y el saudí Yazeed Al Rajhi en el papel de Juan sin miedo, pedal a fondo y que sea lo que Alá quiera… No cuentan con el despliegue de Mini ni con el poderío técnico-económico de Peugeot, pero sí tienen detrás a TMC -ahora más que nunca- pese a ser un equipo con base en la ciudad sudafricana de Johannesburgo. De hecho, este año, y por aquello de ir creando imagen de marca ante el futuro desembarco en el WRC, el equipo pasa a denominarse Toyota Gazoo Racing.
¿Una de sus apuestas? El combustible de sus propulsores. Frente a los turbodiésel de sus rivales, los Toyota Hilux siguen confiando en los potentes motores de gasolina. Además en esta ocasión estrenan nueva mecánica, importada directamente del nuevo Lexus RC-F. Es el V8 más potente de serie construido por la marca y se beneficia de importantes mejoras en cuanto a eficiencia. Según datos del equipo, con los pertinentes cambios en la gestión, para la versión de carreras se ha conseguido una potencia de más de 380 CV. Pierde con respecto a la versión de serie pero gana en par motor: 600 Nm y gran parte del mismo disponible desde las 2.000 rpm.
Como los grandes cambios en la evolución de chasis y concepto de vehículo se llevaron a cabo para la edición de principios de este año del Dakar, en esta ocasión se ha actualizado la imagen a la nueva versión Hilux y se ha trasplantado todo el apartado de suspensiones de la anterior evolución.
A finales del pasado mes de noviembre el equipo Toyota Gazoo Racing realizó los últimos tests en el desierto del Kalahari. Todo parece haber ido bien tras varios días de prueba con temperaturas de hasta 45 grados. Tras esta última prueba antes de embarcar los coches rumbo a Argentina, De Villiers aseguraba que el nuevo Hilux «es mejor que su predecesor en todos los aspectos»…
