Allá por 2010 el madrileño se convirtió en piloto habitual del Nacional de Asfalto. Aquella temporada empezó con un Citroën Saxo S1600 que luego cambió por un Mitsubishi Evo X con el que sufrió varios abandonos, que le sirvieron para asentar las bases de un proyecto que funcionó en los años siguientes. De hecho, en 2011 y 2012 fue Campeón de Grupo N al volante de la citada montura.
Y todo esto dio paso a un importante reto deportivo que echó a andar en la recta final de 2013. Sí, hablamos de la historia del Lotus Exige, cuya fiabilidad hizo que Sergio Vallejo, Álvaro Muñiz o Fran Cima decidieran abandonar sus proyectos… Pero a base de cabezonería, Marbán y toda la gente del M.Boss Racing fueron quienes de rediseñar y cambiar prácticamente toda la mecánica inglesa para convertir el pequeño GT en un coche rápido y fiable, que a punto estuvo de amargar la fiesta a algún R5 en el Rallye de Madrid 2016.
Después, Daniel Marbán ya empezó a buscar un nuevo desafío. Como no podía ser de otra manera, desde entonces todo pasaba por armar un proyecto con un R5. Finalmente lo ha conseguido. El Rallye Islas Canarias está a la vuelta de la esquina y será allí donde, acompañado por Víctor M. Ferrero, debute a los mandos del Volkswagen Polo GTI R5 con los colores de Teo Martín Motorsport.
Pregunta: No sabíamos muy bien con qué intención corrías Lorca y Córdoba pero ahora todo tiene sentido. Vayamos de atrás para adelante. Realmente llegáis un poco tarde como equipo en conjunto pero tú ya estuviste presente en Lorca con un N5 de RMC y eres séptimo en la clasificación general del campeonato…
R: Sí, efectivamente la intención de correr en Lorca era para puntuar en el Supercampeonato y decidimos salir con un N5 porque a priori era un coche que tenía menos prestaciones pero también, con el consejo de Roberto Méndez, se suponía que era un coche más fácil de llevar. Luego además encuadrados en la Copa RMC optábamos a unos premios como así fue al final, que quedamos segundos.
Así todo tenía más sentido. Puntuar, intentar minimizar gastos y riesgos y sobre todo ir cogiéndole aire a la superficie de la tierra.
P: Además también fuiste protagonista en el inicio del CERA en Córdoba, aunque tuviste bastantes problemas. ¿Qué valoración haces de esa participación con el Ford Fiesta R5?
R: Fue para empezar a coger ritmo en el asfalto de nuevo y elegimos un R5 porque ya lo habíamos utilizado en Madrid y Ávila, y lo lógico era ir ya cogiendo sensaciones con un R5 para preparar Canarias.
Como la relación con Roberto Méndez estaba siendo buena nos ofreció correr con un Ford R5 y la única lástima es que tuvimos bastantes problemas y no pudimos sacar todas las conclusiones de ritmo y nivel. Pero bastante contento porque a pesar de los problemas hicimos un rallye muy digno y sobre todo no me resultó difícil volver a los tramos del nacional, más largos…
P: Ya hemos hablado de estas primeras carreras de 2019, vayamos al grano. Después de muchos años corriendo con tu propio equipo y patrocinadores, ha llegado a tus manos la oportunidad que todos sabemos. Me imagino que muy contento a falta de cerrar pequeños flecos, ¿no?
R: Bueno, el acuerdo con Teo Martín Motorsport es total y para mí es una suerte poder ser parte de este equipo, que yo considero que si no el que más, es uno de los que mejor desarrolla el motorsport en Europa. Quitando a los equipos de Fórmula 1 y alguno más con un nivel de inversión muy alto, Teo Martín Motorsport está a la cabeza y de hecho es así en el Open GT.
Ellos tenían muchas ganas de entrar en rallyes desde hacía un par de años pero no habían tenido la oportunidad y ahora que salía el Polo R5 su programa pues desde luego se centraba en recuperar la actividad de rallyes con un vehículo de altas prestaciones. Y qué mejor que hacerlo con el Polo que a priori es el que mejor diseñado está y el que más avanzado es ahora mismo.
De cara a eso esta gente buscaba a un piloto que no solo tuviera experiencia en asfalto y que fuera rápido sino que tuviera un nivel de conocimiento técnico elevado, ya que es un coche complicado de poner a punto y que requiere un estudio y una dedicación plena. Y en ese caso nuestro proyecto encajaba muy bien en los planes de Teo Martín Motorsport y se llegó a un acuerdo, que no costó mucho. Desde el principio encontramos una buena sintonía, lo único que se tuvo que negociar fueron las responsabilidades de cada una de las partes y el calendario, cuál iba a ser el que íbamos a desarrollar.
P: ¿Cómo y cuándo empezó este proyecto? ¿Teo te llama a ti, tú a él, un poco los dos…?
R: Fue un acercamiento mutuo porque bueno, yo ya había tenido contacto con varios equipos para negociar la cesión de un coche durante toda la temporada 2019. Él sabía de ese interés y lo que ocurrió fue que nos encontramos en la exposición Auto Racing en Madrid, tuvimos un pequeño contacto allí, y después ya empezamos a desarrollar una serie de reuniones más serias en las cuales ya empezamos a hablar de inquietudes, los programas que se podían desarrollar con este coche, el nivel de colaboración que íbamos a tener entre los dos…
Fue algo bastante natural porque yo con Teo, desde que ya tuvimos la primera experiencia juntos cuando él compró para su museo el Córdoba WRC que nosotros teníamos, hemos tenido siempre buena sintonía y sabemos entender rápidamente cuál es la situación de la otra parte y nos costó poco. Nos costó poco porque era un proyecto que los dos compartíamos en cuanto al nivel técnico y sobre todo a la ilusión deportiva.
P: Habéis apostado por el Supercampeonato de España, con rallyes de asfalto y tierra. ¿Siempre se trabajó para salir a él o también había otros certámenes encima de la mesa?
R: La idea inicial fue el Supercampeonato porque de hecho era mi primera idea para este año. Aunque hubiese cerrado otros acuerdos hubiese tenido el certamen como mi programa principal y a Teo la verdad, eso también le gustó mucho. Había recibido algunas ofertas para otros pilotos que quisieran correr solo asfalto o solo tierra, él quería empezar apoyar el S-CER porque le pareció siempre una buena idea que hubiera un campeonato mixto que demostrara que los pilotos españoles también pueden ser globales, no solo especialistas en tierra o en asfalto.
Tomando eso como base, durante el año seguramente correremos algún rallye extra como hicimos el Sierra Morena y seguramente en Canarias no solo correremos el Islas Canarias sino que también estaremos en el Villa de Adeje, aprovechando la cercanía de los dos rallyes. Puntuaremos en ese segundo rallye en el asfalto aunque no será el programa principal…
P: Vas a correrlo… Supongo que tu opinión sobre este nuevo certamen es positiva, ¿no?
R: Sí, yo creo que era necesario. Quizá se ha tenido demasiada prisa en darle forma y ponerlo en marcha porque considero que se tenían que haber dado unos meses más de desarrollo. Quizá no es que tuviésemos que dejarlo para el año 2020 pero teníamos que haber empezado con una promoción del campeonato un poco mayor para haberlo dado a conocer antes y que hubiésemos sido un mayor número de pilotos inscritos en él porque es una idea muy buena.
No solo por la alternancia entre tierra y asfalto sino también de cara a las promociones de nuevos pilotos es muy beneficioso. Estos últimos años ha habido pilotos jóvenes que han corrido los dos campeonatos pero de forma independiente sin premio alguno y además multiplicando el gasto. Así que eso también perjudicaba a la promoción de nuevos valores, de nuevos pilotos.
Nuestros pilotos jóvenes que creo es la base del interés de este campeonato, al margen de nombrar al piloto más completo de España, tendrán una base para el Europeo o el Mundial en la cual ya hayan aprendido en las dos superficies.
P: Desde fuera da la impresión que en el asfalto sí podrás ser competitivo pero en la tierra podrá costarte un poco más. ¿Opinas lo mismo?
R: Es evidente que la experiencia que tengo en tierra es muy corta, prácticamente estamos hablando de 200 kilómetros cronometrados, por lo tanto no tiene nada que ver con mi experiencia en asfalto, donde sí podremos dar un buen nivel. Solo faltará que yo sea capaz de poner el coche a punto para mi estilo de pilotaje y que pueda ir rápido con él, pero evidentemente los resultados en asfalto serán mucho mejores que en tierra.
También es cierto que con la experiencia de Lorca no es tanto la adaptación a la tierra o al pilotaje en tierra que no me ha costado tanto, sino los condicionantes como son las piedras sueltas, el miedo a pinchar, los reconocimientos a una sola pasada… Todo eso me costó un poco más pero al final del rallye ya estábamos haciendo tiempos entre los diez primeros con un coche muy poco competitivo, con lo cual hay que pensar que las cosas no van a ir tan mal como se piensa.
Nos costará unos cuantos kilómetros pero al final con los tests que hagamos y los rallyes extra en tierra, ya tendremos un nivel para estar puntuando. No para estar ganando porque hay gente muy experta y con más feeling en la tierra, pero sí para tener unos puestos finales suficientes como para puntuar alto.
P: El coche está a punto de llegar. ¿Qué información tienes del Polo R5?
R: Información técnica ya Volkswagen Motorsport nos ha pasado prácticamente todo lo que hay existente sobre este coche, que tiene un nivel de desarrollo muy alto porque toma como base el WRC, entonces todos los sistemas son muy avanzados.
A mí ahora me toca estudiar los manuales de uso y las características técnicas de todo el coche, pero sí que es verdad que promete luego ser una utilización bastante sencilla. Se ha buscado la simplicidad en cuanto al manejo, lo que es más complicado es cómo llevar ese pilotaje tan simple, que se traduce en sistemas mecánicos de suspensión y transmisión más complejos y bastante más avanzados, y también electrónicos porque es un coche que lleva un alto nivel de electrónica y sin ser ayudas automáticas…
Nos costará pero desde luego es un coche preparado como cualquier otro R5, que también son coches de un nivel de tecnificación muy alto. Nos costará un poco pero al final son coches para que cualquier cliente de nivel privado, sin necesidad de una ayuda constante de ingeniero, pueda correr y pueda tener un uso del coche normal. No estamos hablando de equipos oficiales que necesitan plantillas de diez o quince ingenieros para poder llevar un coche de estos.
P: ¿Crees que el Polo es el mejor R5? o hay que ser cautos porque todas las marcas tienen productos buenos
R: Todos los coches de segunda generación van a ser coches muy buenos. Tanto el C3 como el Skoda nuevo, como el Ford, ya prometen ser muy buenos. El C3 incluso está corriendo en el Campeonato de España y se está viendo que es un coche muy competitivo. Pero sí es verdad que a priori por los datos técnicos que se pueden ver, en teoría el Polo es un coche que ha sido desarrollado por gente que ha tenido un nivel de inversión algo mayor por parte de la marca, partían del WRC… Ellos partían de una base más alta que los R5 de primera generación.
En el caso de Citroën su primer coche no fue todo lo bueno que querían. DS3 o 208 que más o menos la base es la misma. Ford ha tenido un producto muy bueno durante mucho tiempo y se ha visto que a nivel de chasis es muy competitivo pero sin embargo a nivel de motor es el que menos potencia da. Por lo tanto a nivel dinámico se le saca rendimiento pero en rallyes donde se necesita potencia pues lo pasan mal. El nuevo Fiesta está orientado a mejorar a nivel de chasis todavía un poco más pero sobre todo se han centrado en aumentar el rendimiento del motor.
El Skoda es el coche que de primera generación se mostró más competitivo y la evolución no es un coche nuevo, sino una mejora de un coche que ya era muy competitivo y que ha dominado los años que ha estado compitiendo.
El Polo hay pocos resultados ahora mismo para ver pero todo son victorias. En el Mundial, exceptuando algunos problemas derivados de la propia competición, el coche en sí se ha visto que es muy competitivo. ¿Qué sea el mejor? Sinceramente creo que por ingeniería e inversión sí lo es, que luego seamos capaces nosotros de hacerlo vencedor ya depende de nuestra pericia para ponerlo a punto y saber llevarlo rápido.
P: Empezaréis en el Islas Canarias. La competencia será muy amplia, al puntuar también para el ERC. ¿El objetivo es solo el S-CER o tendréis el rabillo del ojo fijado en hacer una buena actuación en general?
R: Bueno, entendemos que el S-CER ganarlo va a ser muy complicado porque hay pilotos muy expertos como Xevi Pons y Pepe López, que además ya han ganado rallyes y la desventaja en puntos es evidente. Lo que sí que yo pretendo es llegar a estar complicándoles mucho las carreras e incluso en asfalto podríamos estar al nivel de pelearles alguna victoria y en tierra intentar puntuar lo máximo posible para que a final de año, con regularidad, podamos estar arriba. ¿Arriba del todo? Desde luego va a ser complicado pero por intentarlo no va a ser. Sabemos que los rivales son muy fuertes…
Respecto a otras competiciones vamos a puntuar en algunos rallyes extra y después de Ourense sobre todo, evaluaremos cuál es nuestra situación en el CERA y cuál es nuestra situación el S-CER y veremos a ver si empiezan a surgir opciones en otro campeonato, y si es posible seguir haciendo las dos cosas a la vez. Va a ser complicado porque la inversión económica es muy alta pero bueno, si tenemos apoyo de patrocinadores y marcas pues intentaremos cerrar alguna carrera extra y estar presentes en más rallyes.
P: A partir de ahí todas las pruebas y a mayores puede que alguna del certamen nacional de asfalto y también del de tierra. Me imagino que también habrá jornadas de tests antes de viajar a las islas afortunadas… Cuéntanos cómo va a ser la preparación
R: Debido a mis compromisos laborales no voy a poder probar el coche todo lo que a mí me gustaría antes de que se fuera para Canarias. Sí es verdad que ya tenemos listo con la organización del Rallye Islas Canarias participar en el Monday Test que ahí sí, empezaremos a acumular una serie de kilómetros y sin tener el coche 100% a punto para la carrera, tendremos ya un set-up sobre el que trabajar…
Fundamentalmente en estas dos carreras tiene que ser primordial acabar sin problemas. Sin golpes, sin averías, sin circunstancias extrañas de carreras… Y ya una vez volvamos y podamos centrarnos en otro tipo de rallyes, tendremos más tiempo para mejorar la puesta a punto y hacer algún kilómetro de test extra, que nos dará mucha información para ir cada vez más rápido.
P: ¿Con qué estarías satisfecho a final de año? Con qué dirías: bueno, no ha ido mal la cosa…
R: A diferencia de lo que mucha gente pensaría, quizá no es una cuestión de resultados deportivos sino que me llama mucho más la atención el proyecto por objetivos técnicos. El poder llegar a entender el coche, saber ponerlo a punto y conseguir a final de año estemos con un coche muy competitivo para mí ya sería un éxito.
Vamos ya con retraso en la puesta a punto respecto a otros equipos y sobre todo porque sabemos que es un coche que va a ser complicado de manejar. Si luego por el camino tenemos resultados de estar muy arriba, podios o incluso alguna victoria, pues claro que van a ser alegrías pero mientras podamos ser medianamente competitivos, tengamos un ritmo semejante a la cabeza y seamos capaces de poner el coche a punto para mí sería un éxito de temporada, empezando en mayo.
Si, como digo, entre medias podemos conseguir victorias y podios mejor que mejor. No tengo ningún objetivo fijo, no nos hemos planteado quedar dentro de los tres primeros del S-CER aunque sabemos que lo podríamos conseguir. Más que nada porque hay mucho trabajo que hacer antes de eso. El coche es un coche nuevo que tenemos que trabajar todo el equipo y probablemente, tendremos que sufrir más de un rallye con un set-up que no sea el adecuado y no salgan los tiempos que el coche puede hacer, con lo cual presión ninguna y disfrutaremos cada kilómetros y cada rallyes.
P: Ya por último, ¿qué continuidad tiene el proyecto?
R: Por ahora lo que sí tenemos claro Teo y yo es que nos tenemos que centrar en este año y si todo sale bien, como debería salir porque por parte del equipo como por mi parte vamos a poner todo el empeño para que los resultados lleguen, la intención es poder prorrogar al menos una temporada más el acuerdo.
De todas maneras eso quedará para final de temporada cuando hagamos balance de los resultados de este año porque una de las cosas que a mí se me ha pedido es que podamos aprender del coche y sepamos ponerlo a punto, porque hay mucho trabajo, hay poca información… Hay pocos equipos que están corriendo con él y sin embargo con otros modelos hay muchos equipos que están corriendo, y se tiene un volumen de datos global mucho más grande. Y Volkswagen tiene sus kilómetros de tests y algunos más que han hecho algunos equipos europeos, con lo cual casi somos pioneros en esta cuestión y pensar más allá de lo que tenemos delante de las narices, que es aprender del coche, sería equivocarse de objetivo. No podemos empezar a pensar en el año que viene si no hemos empezado este.