El apellido Vinyes, conocido por todos, siempre ha estado muy relacionado con el asfalto de la montaña y los circuitos; algo totalmente normal teniendo en cuenta que uno de los mayores éxitos que consiguió Joan Vinyes padre, fallecido ahora hace cinco años, fue ser Campeón de España de Montaña a finales de los 80. Una época en la que su mujer, la también difunta Nati Dabad, que lo había acompañado de copiloto en algunas apariciones en rallyes, empezó a compartir lista de inscritos no solo con él; también con el hijo mayor del matrimonio. Sí, hablamos del por aquel entonces jovencísimo Joan…
Un palmarés familiar muy extenso en subidas y circuitos y que Amalia, la pequeña de la casa, todavía ha agrandado más en los últimos tiempos. Pero Joan hijo, además de ser Campeón de Europa de Montaña de Grupo N en 1991 o Subcampeón de Europa de Montaña en 1993 y 1994, y al margen de lo que consiguió en el Campeonato de España de Rallyes Asfalto y que todos sabemos, también atesora un buen currículum en tierra y de esto ha hablado rallyes.net con él durante esta difícil cuarentena, ahora que todo lo que ha aprendido lo va a tener que poner en práctica al volante del Suzuki Swift R4LLY S.
Pregunta: ¿Cómo y cuándo debutaste en tierra?
Respuesta: La primera vez fue en el año 2000. Cuando estaba corriendo en el asfalto con el Seat Ibiza Junior, la marca me ofreció el kit de tierra por si quería hacer algún rallye y me acuerdo que debuté en el Rallysprint de Suria del Campeonato de Cataluña…
P: ¿Por qué? ¿Veías que la tierra era fundamental… o fue de casualidad porque Seat te cedía el kit?
R: La tierra siempre había sido una disciplina que me había gustado. Me acuerdo de ir a ver rallyes de tierra aquí en Cataluña y siempre me había atraído mucho. Y cuando estaba con Seat salió así, para probar, y recuerdo que el primer rallye me sorprendí de lo divertido que era, de lo que disfrutamos…
A partir de entonces, siempre que tuve la oportunidad hicimos algo más. Aquel mismo año participamos en el Rallye Artesa de Segre del Campeonato de España y haciendo kilómetros y disfrutando mucho, decidí hacer el certamen al completo en 2001.
P: Con el Seat Ibiza hasta llegaste a ir a Inglaterra del Campeonato del Mundo. ¿Qué recuerdas?
R: Fue como un premio de final de año por ganar el Campeonato de España de 2RM en 2001 y surgió la oportunidad de ir a hacerlo. En aquella época estábamos con ABF Sport, con Arcadi, a Dani Solá le habían dejado un coche los de Seat y también se había apuntado Álex Villanueva con un coche de la Copa Seat Ibiza y los tres nos fuimos al RAC de Inglaterra.
Para nosotros fue una experiencia increíble. Los rallyes del Mundial eran aún de los de verdad; eran muy largos… Me acuerdo que había días que nos levantábamos a las cuatro de la mañana para ir a buscar el coche al parque cerrado y nos íabmos a dormir a las once de la noche. Eran rallyes muy largos, muy duros, pero a la vez increíbles. Poder estar con muchos Campeones del Mundo y pasar por los mismos sitios que ellos fue una experiencia muy bonita.
Además fue un Rallye RAC de los auténticos. Empezamos el primer día con buen tiempo, con buen terreno y disfrutando muchísimo pero el tercer día ya se nos complicó todo. Mucha niebla, mucha agua, mucho barro… Pero fue una experiencia genial y de esas cosas que me acordaré toda la vida. A parte me parece que acabamos el 32º de la general con un 2RM…
P: Y como bien dices, fue una especie de premio al haberte proclamado Campeón de 2RM en el Nacional de Tierra 2001…
R: Sí, fue el premio a lo que habíamos hecho en 2001, que podemos decir que fue mi consagración en la tierra. Ganamos el campeonato y me acuerdo que en aquella época estaba Angelino Jiménez con un Seat Ibiza Junior igual que el nuestro y le ganábamos bien en todos los rallyes pero teníamos unos palieres que se nos rompían mucho y tuvimos que abandonar un par de veces.
Hasta el último rallye no conseguimos el título, nos costó, pero los resultados fueron muy buenos. Siempre estábamos delante de los 2RM cuando acabábamos y muy arriba en la general. En alguno me parece que hasta hicimos un quinto de la general a pesar de los coches que había… Fue un año bonito y en el que disfrutamos.
P: Tardó poco en llamar a tu puerta Peugeot Sport España y el proyecto estaba centrado en el asfalto. Te tocó decirle hasta pronto a una tierra a la que volverías con un sencillo 206 en 2005, cuando aún estabas corriendo con la versión S1600 del equipo oficial. ¿Había planes de un programa mixto de cara al futuro? o ya veías que todo podía acabar pronto
R: Con Peugeot estuvimos dos años corriendo en asfalto y luego el tercer año adquirí un 206 Grupo A porque me apetecía volver a hacer algo en la tierra, pero era un proyecto privado, por nuestra cuenta, que la marca al ser un Peugeot vio bien.
Lo hice con mi antiguo mecánico, Arcadi de ABF Sport, e hicimos un proyecto privado pero disfrutamos muchísimo. Era un coche que iba muy bien pero que también nos daba bastantes problemas y al final no pudimos ganar el título. Se lo llevó Bruguera pero no porque fuera más rápido sino porque tuvimos muchos abandonos.
P: La temporada siguiente, ya fuera de la órbita de la marca del león, participaste en el Campeonato de España de Rallyes de Tierra y en el homólogo catalán al volante de un Subaru…
R: Como me quedé con ganas de continuar en la tierra, adquirimos un Subaru en Argentina, en Barattero, que era un buen preparador de Subaru y me hizo una buena oferta porque le interesaba que yo ganara el campeonato para promocionar estos coches y me dio la oportunidad de llevar un 4×4 con casi 300 CV. Una máquina en esos años…
Hicimos dos temporadas y disfrutamos muchísimo. Conseguimos dos Subcampeonatos de España y el segundo año estuvimos luchando hasta la última carrera con Dani Solà, que era un piloto del Mundial y lo hicimos correr mucho. No pudimos ganar, pero hicimos una buena temporada y estuvimos luchando hasta el final.
P: Y podemos decir que 2007 fue tu año. Además de ser Subcampeón de España como has comentado; también Campeón de Cataluña. Mejor imposible, ¿no?
R: La verdad que sí. En esa época hacíamos todos los rallyes que podíamos y el Campeonato de Cataluña de Rallyes de Tierra nos servía como entreno para seguir corriendo… Disfrutamos muchísimo y en 2007 lo ganamos y otro título, que también lo merecíamos.
P: A continuación llegó el turno de la Copa Renault con el Clio R3 en el Nacional de Asfalto pero aún así también hiciste algo en tierra. No querías abandonarla…
R: Como he dicho, era un disciplina que me gustaba y que me sigue gustando y con el Clio disputamos todo el campeonato de asfalto pero si teníamos la oportunidad de salir en algún rallye del regional, ya que no teníamos el Subaru, pues lo hacíamos para poder disfrutar del coche.
P: En 2010 fichas por el equipo Suzuki y a final de año tomáis la salida en el Rallye de Cataluña. ¿Cómo fue la etapa de tierra? ¿Qué tal funcionaba el Swift S1600?
R: Fue como un premio para mí y para el equipo poder estar allí. El equipo estaba súper ilusionado de poder disputar un rallye del Campeonato del Mundo y fue una experiencia muy buena porque hicimos buenos test y estuvimos probando bastante el coche antes de empezar el rallye pero tuvimos mala suerte. En la primera etapa, la única de tierra, casi al final del primer tramo, di contra una piedra, rompimos una rótula y nos tuvimos que quedar allí.
Fue una lástima porque en aquel entonces había los parciales de los tramos y me acuerdo que estaban los Citroën oficiales, estaba el equipo Suzuki que hacía todo el campeonato… y estábamos haciendo los mejores parciales del tramo. Fue una pena el abandono en la etapa de tierra porque creo que podíamos haber hecho un buen resultado y además me encontraba a gusto y a buen ritmo.
P: Salvo algún rallye muy puntual con el Subaru Impreza durante toda esta década, no habías vuelto a hacer nada en tierra hasta que llegó el Suzuki Swift R4LLY S que no solo te ha devuelto a dicha superficie; también te volverá a colocar -o eso esperamos- en una prueba del WRC. Más motivación imposible, ¿no crees?
R: Me acuerdo cuando a principio de este año me llamó Juan López Frade y me dijo que empezaríamos en el Rallye Serras de Fafe y el Rallye de Portugal porque tenían unos compromisos en el país y tenían que correr allí. Me hizo una ilusión increíble, la misma que a ellos poder hacer esto y empezar en tierra con el coche, y sinceramente ha sido una experiencia muy buena para nosotros porque en Fafe fue donde empezamos a hacer kilómetros con el coche.
Hicimos un test antes pero había llovido mucho, estaba lleno de barro y solo pudimos comprobar que el coche funcionara bien pero no pudimos hacer reglajes ni tener sensaciones del coche. Así que nuestro objetivo en Fafe era hacer un test, hacer kilómetros, no cometer errores y sobre todo acabar el rallye. Y ha sido así. Por nuestra parte, tanto para mí como para Jordi, hemos cumplido el objetivo y ya conocemos el coche, que no tiene nada que ver con los que llevaba yo en la tierra.
Estos coches modernos como el Suzuki R4 son coches muy diferentes. Las suspensiones, las geometrías o el chasis son muy diferentes y te permiten ir muy deprisa pero necesitas tener la experiencia.
En Fafe hemos estado siempre por detrás de Javier Pardo, que es un piloto que lleva ya dos o tres años corriendo con este tipo de coches, pero también demostramos en un par de tramos que corrimos bien que estábamos en sus tiempos. Incluso le ganamos en uno… Hemos cumplido el objetivo y ahora, sea en el Rallye de Portugal o en otro rallye de tierra, mi ritmo ya va a ser completamente diferente.
P: El Rallye Serras de Fafe te sirvió para desoxidarte y el coronavirus -vamos a sacar lo positivo- ha querido darte más tiempo para asimilar lo aprendido allí…
R: Hemos pasado el examen, las eliminatorias… Ahora ya conocemos bien el coche, hemos hecho 140 kilómetros de tramo de verdad, hemos visto hasta dónde podemos ir… Cuando haya la siguiente oportunidad vamos a estar a un ritmo muy diferente y con una confianza que no teníamos en Fafe.
Lo importante es que el equipo está súper ilusionado para esta nueva temporada que esperemos que vuelva pronto y el objetivo va a ser estar luchando más arriba.