Educado, amable y accesible, Érik Comas forma parte de esa estirpe -casi siempre francesa- de pilotos que le pegan a todo lo que tenga cuatro ruedas y un volante, sea cual sea la disciplina. Y en este caso, aunque con pocos resultados, ha llegado a lo máximo que puede aspirar un piloto: la F1. Tras su paso por las escuderías Ligier y Larrousse, a principios de los años 90, Comas tiene en su haber ser un ex GT, ex Le Mans... y ahora un jubilado de su faceta profesional que no para de disfrutar con eso que no pudo practicar cuando empezó a correr… ¡con 18 años!
Su sueño eran los rallyes y aunque la economía no pudo en su momento, ahora la vida se la devuelve pudiendo correr con ese coche con el que siempre soñaba: el Lancia Stratos. Érik es un auténtico apasionado de este modelo que recuerda de su infancia. De hecho él ha creado la página web dedicada a este automóvil mítico: www.lanciastratos.com
Pero no nos enrollamos. Con motivo del pasado Rally Costa Brava tuvimos ocasión de charlar brevemente con él de sus dos pasiones: el Stratos y los rallyes…