Todos los acontecimientos apuntaban en ese sentido: La participación de François Delecour en los rallyes de Francia y Córcega con el Porsche 911 GT3 del preparador británico Richard Tuthill; el anuncio por parte de la FIA de la creación de una copa R-GT a partir de 2015, con cinco rallyes de asfalto del WRC y del ERC (Monte Carlo, Ypres, Alemania, Valais y Córcega)… era cuestión de tiempo, y eso es lo que ha confirmado a rallyes.net el piloto galo. “Espero que en un breve plazo, creo que no más de una semana, pueda cerrar definitivamente un programa para estar presente el año que viene en este certamen”, aseguraba Delecour en el transcurso del Fórmula Rallye que se ha celebrado durante la jornada de hoy en la localidad pontevedresa de Silleda.
Y aunque no es ninguna novedad que el proyecto se lleva gestando algún tiempo, el francés no oculta sus ansias por hacerlo realidad. “Creo que es una muy buena alternativa para pilotos veteranos como yo -así se lo preguntamos y él nos respondió sin ningún atisbo de ofensa por ese tratamiento, pese a estar más en forma que muchos coetáneos- de volver a un certamen internacional y de luchar por un título de campeón. En estos últimos años solo he tenido la oportunidad de disputar pruebas puntuales del WRC, como el Montecarlo, pero sin continuidad ni más objetivo que el de terminar. Ahora existe una meta mucho más clara y, además, con un coche que creo que es fantástico; un auténtico vehículo de carreras con un enorme potencial de evolución. Eso sí, pienso que la FIA lo ha restringido demasiado. Me recuerda a la situación que se vivió en su momento con los Peugeot 306 Maxi y las bridas que se impusieron para evitar que hiciesen sombra a los WRC. Con los Porsche GT3 y la brida de 36 mm es algo parecido; temen que en asfalto, si abren la mano en la reglamentación, este tipo de vehículos puedan llegar a desbancar a los 4×4 de cabeza”.
Delecour acababa de bajar de un Mitsubishi Evo X de AR Vidal antes de pudiésemos arrancarle estas declaraciones, en medio del barullo de motores y gentío que ensordecían cualquier conversación dentro del recinto ferial donde se celebraba el evento de cierre de temporada automovilística en Galicia. Acto seguido el francés se subía a un Legend Car que Vicente Vieitez, piloto habitual del Campeonato Gallego de Montaña, le ofrecía. No lo dudó ni un segundo. El estado físico y las ansias de pilotar de François Delecour deparan una temporada muy animada si finalmente, como así parece, regresa a la escena internacional con tan interesante programa.