A estas alturas ya nadie duda de que el Monte sigue siendo ese rallye que se sale de la norma. Una prueba donde, como ya apuntaba Kris Meeke antes del inicio de la misma, el potencial de los nuevos coches no iba a contar en el resultado final frente a elementos más determinantes como la elección de neumáticos, la buena lectura de la carretera… y, sí, una pizca de suerte.
A falta de los últimos tramos de la edición de este año Monte Carlo ha dejado fuera de la victoria a las marcas de las que se esperaba todo por llevar más tiempo haciendo los deberes con sus unidades 2017. Al final las cosa también va de fortuna y mientras Thierry Neuville se iba largo en una curva y en un toque echaba por tierra su gran carrera y sus opciones de victoria, Sébastien Ogier también apoyaba ligeramente su Fiesta y seguía en carrera como si nada hubiera ocurrido, asumiendo un liderato que hoy tiene que mantener para dar la primera victoria del año a Ford… e incluso un doblete si Ott Tanak se mantiene ahí.
Al final va a resultar que el Volkswagen Polo era bueno, pero que el toque de gracia se lo daba el piloto francés con cuatro títulos mundiales; el mismo que ahora está despertando a Ford de su letargo (y aquí desactivamos el modo irónico).
Queda una jornada por delante y todavía todo puede cambiar -¡estamos en el Monte!- pero también hay destacar el papel de Toyota… o de Jari Matti Latvala, que ahora es tercero y de quienes, en pretemporada, aún tuvimos ocasión de leer algún análisis sesudo de ingenieros de marca en destacados medios internacionales, calificando el Yaris como una incógnita y algo inestable y nervioso, a la vista de las imágenes en los tests previos. Entre eso y los vaivenes que dio la marca entre TMG y la estructura que montó Tommi Makinen, después de practicar un agresivo ERE, todo apuntaba a año de transición… y quizás así sea, pero las cosas no empiezan nada mal en un rallye que, todos insisten, no suele ser el reflejo de las prestaciones que darán los vehículos el resto de la temporada.
Resulta curioso, pero ahora Dani Sordo, tras varios problemas con su i20, y Craig Breen (éste con un WRC de 2016) están peleando en la cuarta y quinta plaza como puntas de lanza de sus respectivas marcas; así es este rallye.
Una prueba en la que los Abarth, aunque ya no están en carrera, han sacado buenas conclusiones. El veterano y experimentado François Delecour ha llegado a rodar entre los 20 primeros clasificados hasta que la rotura del diferencial, en la jornada de ayer sábado, les ha obligado a abandonar; pero ahí queda la demostración de que el coche tiene futuro; veremos qué da de sí en el Campeonato de España de Asfalto con Álvaro Muñiz y Antonio Solórzano.
Por lo demás, Surhayen Pernía y Rogelio Peñate ocupan la tercera plaza entre los Clio R3T.
Asfalto, nieve y hielo a ras de suelo…