No todos los días un bicampeón del mundo de Rallyes, Carlos Sainz para más señas, se ofrece a ayudarte. Pero el madrileño afirma que está listo para echar una mano a Citroën en la solución de los problemas de suspensión del C3 WRC, fallos que acompañan al equipo desde el inicio de la temporada, recoge Autosport. Los galos sólo han logrado una victoria en las seis primeras pruebas disputadas (México, con Kris Meeke). La formación es cuarta en el Campeonato de Constructores.
Cómo conducir el Citroën C3 WRC. Vas a flipar
Sainz estuvo en el pasado Rallye de Portugal y habló largo y tendido con Meeke sobre las especificaciones del coche de 2017. “Siempre he pedido a la FIA (Federación Internacional de Automovilismo) vehículos más ligeros, así que fue una buena noticia saber que llegarían. Me interesaría mucho probar uno; debo charlar con Citroën para ver si están interesados”, ha declarado a la web británica.
El programa principal del español se centra ahora en los rallyes cross-country (incluyendo el Dakar) con Peugeot, integrante del Grupo PSA, del que forma parte también la marca de los chevrones. Por eso, al preguntarle directamente si estaría preparado para ayudar a Citroën a encontrar una solución, la respuesta de Sainz ha sido tajante: “Trabajo para el consorcio; si puedo ser útil o no es algo que tienen que pensar ellos. Para mí siempre ha sido un reto hacer un coche tan rápido como sea posible”, añade.
Sin embargo Yves Matton, director del equipo, ya ha anunciado que no hay planes para implicar a otros pilotos en el desarrollo del C3 WRC, aunque acepta que la experiencia del español sería muy valiosa.