Revive, igualito que en sus mejores épocas de Subaru. Petter Solberg ha encontrado en el rallycross el elixir de la juventud, ese que le permite disfrutar de las carreras como antes, montar sus shows habituales y, lo más importante, ganar. Con la conseguida este fin de semana en Alemania, Solberg lleva cuatro victorias en la presente temporada del Wolrd RX. Para las estadísticas, de momento es el único piloto capaz de ganar más de una prueba desde que este certamen es lo que es; un evento global que sube como lo espuma en repercusión y público.
Ahora, además, a ese palmarés el noruego del Citroën DS3 va a sumar uno de esos triunfos in extremis; tan apurado como 5 centésimas de diferencia con respecto al Audi A1 del ex DTM Matías Ekstrom. ¿Cómo es eso?, pues fíjate en la siguiente foto y hazte a la idea… habría que tirar de archivo para saber si es ésta una de las llegadas más apretadas de la historia; pinta la tiene. De hecho ninguno de los dos implicados supo el resultado final hasta que se lo comunicaron por radio.
Con esta victoria tan disputada, Petter amplía su ventaja en la clasificación general… ahora con respecto a Topi Heikkinen (VW Polo). La quinta plaza lograda en Alemania por el finlandés le permite recuperar la segunda posición en la general a costa de Reinnis Nitiss, quien cede así dos puntos con su rival tras sufrir problemas en el motor de su Ford Fiesta en la tercera manga clasificatoria. Con todo, los 158 y 160 puntos de ambos empiezan a estar lejos de los 212 de un Solberg que ya acaricia con los dedos un título mundial de rallycross para el que le faltan apenas tres pruebas más.