Bueno, finalmente salió el sol…. justo para que pasara el coche ‘0’ junto a Parke’s Castle. Cinco minutos después era todo gris y nuestro gozo en un pozo, pero al menos no llovía. Eso sí, el frío arreciaba y sin guantes había que ‘calentar’ el dedo índice para tener sensibilidad para disparar.
A nivel de la carrera ya estaba todo sentenciado desde el primer día. En Citroën optaban por la seguridad y montaban los Pirelli invernales, los Sottozero, pese a que no cayó una gota. Tras Loeb, un Sordo que intentaba mejorar su estilo fotográfico entre tramo y tramo (Canon-ista por más señas) y un Hirvonen que jaleado por la prensa británica pensaba que el segundo lugar podía ser suyo. Chris Atkinson lograba superar a un Henning Solberg bastante efectivo esta vez en asfalto, pero el australiano ‘erraba’ de nuevo y el noruego recuperaba el cuarto lugar.
Esta vez los organizadores del Rally de Irlanda sustituían el último tramo en el acantilado de Murraghmore en 2007 por una superespecial en la ciudad costera de Donegal. Y la fiesta estaba ya montada. La verdad es que estos irlandeses, Garda aparte, son majos y muy parecidos en carácter a nosotros. Nada que ver con la flema británica de la isla de al lado. En el ‘pub’ más marchoso de Donegal van y se montan una colecta para la vuelta de Subaru al Mundial y aunque sin música no faltaron los piropos a las Maureen O’Hara locales, o sea las pelirrojas, ni las canciones irrespetuosas con brindis al sol entre coche y coche ante la risa de los mismos policías. Por cierto, no se como se lo deben tomar cuando ven a alguno con una copa de más dando trompos alrededor de la mediana de la carretera entre Bundoran y Sligo… .
Y ahora que todos los constructores estaban más o menos de acuerdo sale el MM diciendo que de Super 2000+ en 2010 naranjas de China…
Que me dejen a mí mandar cinco minutos en 8, Place de la Concorde, 75008 París.
Esteban Delgado