Nada más levantarme me he conectado a Internet para saber cómo se movía la nube de cenizas a través de Europa. Y es que mucho me temo que el lunes no podré volar a Munich ni a casa. Jordi y yo habíamos decidido ir directamente al cuarto tramo de la mañana, Riva, al pasar sobre el mediodía a escasos metros del mar Negro. De paso, aprovechamos para hacer la asistencia matinal y preguntar si iba a celebrarse la segunda pasada ya que los pilotos se habían quejado bastante sobre el estado de su piso. Pero la organización trabajó por la noche para ponerlo en condiciones, dando incluso su visto bueno al mismo el inspector FIA, Amán Barfull.
Pero el sol no se quiso sumarse a la fiesta. Es más, la anunciada lluvia hizo su presencia y ‘mató’ el colorido de la instantánea. Los tiempos iban llegando y Dani Sordo perdía posiciones, mientras el ‘niño bonito’ continuaba acaparando la atención de sus próceres. Así que decidimos llenar el estómago con lo que fuera, lo que en Turquía siempre es un misterio, con una especia de pizza rellena de queso, patata y espinacas. Lo único que no falta nunca es un té extracaliente y eso que uno la tiene casi de amianto, incluso en algunas gasolineras lo ofrecen gratis a sus clientes.
Visto que el tiempo era malo, nos hemos dedicado a recolectar ‘chapa’ logrando incluso hacer dos tramos seguidos gracias a las indicaciones de Luis Eiriz y su tropa. Dos curvas izquierdas una desde el exterior y otra del interior y fuera, hacia la última asistencia para poder hablar con el piloto montañés, mientras que el decano de la profesión, el británico Martin Holmes lo hacía con el americano Ken Block, que lograba completar toda una etapa con su Ford Focus WRC.
En el camino de vuelta una día más hemos pasado al lado del Istanbul Park, el circuito donde se desarrolla la carrera de Fórmula 1, con accesos de tres carriles donde no se puede circular a más de 50 km/h. Hoy, para colmo nos ha tocado circular detrás de un coche de la Jandarma y cuando hemos parado a hacer la foto de las instalaciones y se ha situado detrás de nosotros yo ya me he visto como el protagonista de ‘El expreso de medianoche’ (a ver esa culturilla cinematográfica…).
A ver si el sueño es mañana una realidad, no sea que no pueda volver a España hasta Navidad como el de El Almendro, aunque por una victoria de Dani incluso me sacrificaría… .