Pese a no ingerir una Dormidina, ayer descansé bastante bien tras el vuelo intercontinental, aunque a las cinco de la mañana ya estaba en el baño con el ordenador en las rodillas para no molestar a Jordi Rierola.
Hoy tocaban tres clásicos entre los tramos del Rallye de Argentina, El Mirador, Mina Clavero-Giulio Cesare y El Cóndor-Cuesta Blanca, o sea hasta Copina más 20 kms de asfalto hasta Cuesta Blanca, que hace unos cuantos años, ya como un cuarto de siglo, eran de tierra y que era conveniente alcanzar antes de que los espectadores y coches de carreras salieran de la clásica especial para llegar tranquilos a Villa Carlos Paz.
Por esa razón ayer, para llegar a Traslasierras, había que dar un rodeo importante por Alta Gracia aprovechando para ver la sección de asfalto de la segunda etapa. En fin que tenía razón Mikko Hirvonen cuando hoy declaraba que le gustaría dar una vuelta en su Fiesta RS WRC al responsable de la inclusión de asfalto en Argentina, ¿será por falta de tramos de tierra en este país…?. 13 kilómetros de un rapidísimo asfalto ancho en bajada con paellas sucias, donde espero que mañana no pase nada. Será, casi, casi, como tirarse en parapente imitando el vuelo del cóndor…
Como salimos a las 7 de la mañana, no como algunos compatriotas (y no quiero señalar….) que ‘inauguraron’ algunas de las celebres discotecas o whiskerías de Villa Carlos Paz, después de repostar e hinchar las ruedas de nuestro Fiat Palio que no sé por qué motivo pierde de un día para otra la mitad de la presión del aire. Al final llegamos con casi dos horas de adelanto a la salida de El Cóndor, así que nos dirigimos al hotel La Posta del Quenti para confirmar mi reserva de una mesa para comer con los colegas entre tramo y aprovechar el wifi y enviar algunas crónicas.
El primer punto fotográfico de ayer en un día soleado con temperaturas de dos cifras, pese a que había cogido (uy, perdón que aquí ese verbo significa otra cosa…) el forro polar, era a un kilómetro de la salida de El Cóndor a donde nos costó llegar al desconocer los comisarios y la policía que sí que podíamos pasar por el tramo y que solo gracias al Delegado de Seguridad de la FIA, Jacek Bartos, lo conseguimos.
Pero pese a que no había ni cintas ni publicidad (ahora hemos pedido a la jefa de prensa de la FIA, Hayley Gallagher, que nos de los puntos donde estarán los cámaras de TV de la North One Sport), siempre es una lotería saber donde los tuercas argentinos aparcan sus autos, sí en las ‘playas’ (aparcamientos) asignadas o en los huecos más insospechados, como así fue al encontrar un par de furgonetas en el exterior de una de las dos curvas que allí había.
Al volver sí que nos tocó hacer alguna rapel que otro, llegando finalmente a donde estaba nuestro coche un poco más apartado del tramo que el de Luis Eiriz a quien la policía retuvo casi hasta la llegada del coche escoba. O sea que fuimos los primeros en llegar al restaurante ya lleno hasta arriba y donde lamentablemente la calidad de la línea había caído hasta 10k, haciendo casi imposible bajar ni subir nada, aunque a base de comer la tartita de tomate y queso, el Pollo al disco y el Brownie con helado encima del teclado del ordenador pude enviar la crónica con foto incluida al periódico y alguna historia más. Y es que las cinco horas de diferencia le ‘matan’ a uno profesionalmente hablando.
Después de casi liarla con las facturas, los pagos en efectivo, pesos y dólares, o con tarjeta era hora de acudir al clásico paisaje lunar de Giulio Cesare. Este año un afortunado email de Martin Holmes me advirtió de que el final del tramo había sido adelantado en poco más de un kilómetro lo que dejaba las tres clásicas paellas finales sin acción. Lo puse en conocimiento del resto de compañeros apostándome con François Baudin una cena en El Bulli si la FIA cambiaba la meta.
Menos mal que el restaurante de Ferrán Adrià cierra sus puertas este verano porque no se cómo ‘Testarrosa’ se puso en contacto con Michèle Mouton y los organizadores dieron su brazo a torcer…. Bueno, la cena será en Salou si dios quiere, en ‘La Morera de Pablo y Ester’ por más señas.
Fue cuestión de llegar y que un policía empezara a tocarnos la pera en un sitio donde hemos estado siempre desde que él estaba en la guardería. Uno se deja parte de su crédito profesional en por lo menos que no te quiten lo que tienes y llega uno que no se entera de la misa la mitad…
Bueno, se salvó lo que se pudo, tocaba esperar a Benito Guerra después de que todos nos lo ‘tragáramos’ en el tramo anterior pensando que había roto y va el mejicano y rompe el motor delante de su fotógrafo oficial. Pa mondarse, oiga. Total, que si te llevo o no te llevo, si el primer auto alcanzó Giulio Cesare a las cuatro de la tarde no salimos hasta a las cinco y media y como era de prever no pudimos evitar el atasco, optando por volver por la sección de tierra del primer tramo del sábado al igual que los participantes que no pudieron tomar la salida en El Cóndor al quedar neutralizado el tramo por el accidente de un espectador.
Impresionante la cantidad de público dispuesta a pasar la noche en el tramo para ser espectadores de excepción mañana, hasta han construido tribunas dignas del estadio de Wembly, todo el mundo tratando de aparcar donde fuera con la noche cayendo, hasta la cabeza tractora de un camión, oiga, y preparando los asaditos en cualquier parte que no estaba el bosque como para prender fuego. Total que hasta las 19h 30 no cruzamos la puerta de la sala de prensa.
En cuanto a lo deportivo, ojalá Jari-Matti Latvala mantenga su ventaja. El finlandés ganó los tres primeros tramos de la jornada y se aprovechó de la porción de asfalto para distanciarse del resto en un terreno donde no es precisamente un especialista. Veremos si JM mantiene mañana o aumenta los 18,2 s sobre Petter Solberg y los 28,8 sobre Sebastien Ogier, lo sorprendente son sus declaraciones ¡alegrándose de salir mañana el primero!.
En cuanto a la penalización de un minuto de Loeb por adelanto en el control horario del reagrupamiento, recuerda a lo ocurrido entre Carlos Sainz y Marc Martí en 2003 por estas tierras. Si en aquel momento no se retiró, no creo que sea justo se haga en esta ocasión aunque el minuto y medio de retraso sea mucho a recuperar incluso para un siete veces campeón del mundo y cinco del Rallye de Argentina.
Bueno, creo que esta es la vez que más me he enrollado , me voy a dormir que son las 3h 51 en la Madre Patria. Por cierto, mañana hablaremos de mi hotel, El Mesón de la Montaña.