El jueves por la noche recuperé mi cama ya que como Les Kolczak sufre de apnea respiratoria el día anterior tuve que coger el edredón y bajar a dormir a la primera planta de la ‘casa de Hansel y Gretel’, pero como el resto de inquilinos se quejaron de sus ronquidos le mandamos para abajo.
El Rallye de Suecia cuenta cada vez con menos puntos fotográficos de interés conocidos, ya que con la nieve una curva insulsa puede proporcionar una gran instantánea. Mañana sábado no iremos al tradicional final de Sagen ya que la organización ha anticipado la línea de meta 450m y hoy las opciones eran el ‘Hagfors Arena’ al final del tramo de Varmullasen o el salto de ‘Colin’s Crest’. Pero como el primero también tenía un salto y daba la posibilidad de estar en la asistencia del mediodía, no hubo color a la hora de tomar la decisión.
Distante apenas unos 15 km de la sala de prensa del aeropuerto de Hagfors, de fácil acceso y aparcamiento, aun así llegamos con tiempo más que suficiente bajo la nevada que estaba cayendo. Este año los recortes en Citroën han motivado que de momento no dispongamos del servicio de SMS con los tiempos de cada tramo, así que íbamos un poco ‘perdidos’ a la hora de saber cómo iba la carrera. Afortunadamente, tras el paso del coche 0 supimos que los dos VW estaban en cabeza. Yo me situé en el mismo punto donde obtuve la instantánea portada de Imágenes de Rally 2012 (publi encubierta que te va Oscar…), pero con la intención de bajar a lo que hasta el año pasado era la meta que fue retrasada unos cientos de metros más tras llevarse un participante la célula fotoeléctrica hace dos años y que permitía situar una típica casa dentro del encuadre. Además, Sebastien Ogier me hizo el ‘favor’ de pasarse algo y poder hacer la doble página de apertura del año que viene (que no es la misma que aparece aquí…).
Sin embargo, por la tarde un par de autobuses le fastidiaron a Jordi hacer la misma foto y yo me decidí a subir al salto famoso y poder hacer un par de tomas diferentes, aunque hubo que darle algo al ‘fotochop’ para borrar el arco que suele enmarcar este tipo de sitios. Está hecho de prisa y corriendo, o sea que disculpen los profesionales si resulta evidente.
En cuanto al desarrollo de la primera etapa, pues parece que ya está todo dicho. El dominio de Sébastien Ogier y el VW Polo R WRC ha sido aplastante, cinco tramos ganados de siete, frente a otro Sébastien (Loeb) que no es manco en terreno nevado con un modelo como el Citroën DS3 WRC dominador de las dos últimas temporadas y del Rallye de Montecarlo. Los 31,4 segundos de ventaja del de Gap pueden ser definitivos de cara a las dos últimas etapas después de que incluso teóricamente el Ford Fiesta RS WRC de Mads Ostberg (cuarto clasificado) estaría delante de la marca del doble chevron de no haber penalizada el noruego 20 segundos por llegar tarde al control tras tener que rellenar de refrigerante el circuito de su vehículo.
Mala jornada para el equipo francés ya que el teórico piloto nº 1 del equipo en 2013, el finlandés Mikko Hirvonen, volcaba en el primer tramo de ayer perdiendo 24 minutos y toda posibilidad de entrar entre los diez primeros, entre los que el joven sueco de 22 años Pontus Tiedemand, tercero en la WRC Academy del año pasado detrás de ‘Cohete’ Suárez, se mantiene en sexta posición en su debut mundial con un Ford Fiesta RS WRC, incluso frente a su padrastro Henning Solberg, noveno, con un vehículo idéntico.
Mala suerte también para Dani Sordo que se salía en el antepenúltimo tramo de ayer perdiendo cuatro minutos y medio cuando era octavo, cayendo al decimo primer lugar, por lo que apenas podrá llevarse con mucha suerte algunos puntitos. Lástima.